Esta historia tiene que ver con el cambio que se produjo, allá por el siglo XVIII, en la forma de ver y comprender el uso del mueble. Por primera vez unidas de la mano comodidad y lujo, se desarrolla un completo repertorio de tipos de mueble para los más variados fines. Mullidas butacas que aún hoy en día hacen las delicias de tardes de lecturas y confidencias...
Pareja de sillas Luis XV, tapizadas en petit point. |
La anécdota que os quiero contar, relata el momento en el que se le pregunta a una de las hijas solteras de Luis XV, por qué no había entrado en un convento como su hermana doña Luisa, a lo que ella respondió con esta encantadora frase:
"C´est un fauteuil qui me perd" ("Es un sillón lo que me pierde").
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Estamos encantados de recibir vuestros comentarios, dudas o sugerencias.